10 imperdibles de Aspen, Colorado
En el mundo hay lugares mágicos que se transforman radicalmente con el paso de las estaciones, cambiando de un paraíso invernal a una visión veraniega. Ahora que, si además le agregan una pisca de glamour, un aire de romance, y un toque de aventura, se verán en el corazón de Aspen, Colorado, en los Estados Unidos. Estos son sus imperdibles.
Aunque Aspen tiene un aeropuerto local, vale mucho la pena volar a Denver y rentar un auto. Y es que manejar entre picos nevados, profundos bosque y planicies infinitas es una experiencia inolvidable.
Ya sea que elijas el Independence Pass o la autopista I-70, descubrirás que el trayecto puede ser tan memorable como la estancia.
Es bien sabido que Aspen es el destino de esquí por excelencia. Cómo no va a serlo, si de diciembre a febrero sus 330 pistas se cubren de la nieve más ligera y suave que existe, y cada una de sus cuatro montañas ofrece todo desde clases para niños hasta los mejores bistrós del Après Ski.
Pero así como el invierno es para esquiar, el verano es para disfrutar de la naturaleza. Desde acampar en el Parque Nacional de White River hasta subir a lo más alto de las montañas Maroon Bells, hacer kayaking en el río Roaring Fork o recorrer el Snowmass Park en una bicicleta de montaña, Aspen tiene algo para todos.
Mejor aún, las aventuras en Aspen no siempre implican movimiento. A veces, una visita al Museo de Arte, una noche en el Teatro Aspen, un concierto en el Festival de Jazz o un sábado de música clásica, pueden ser tan emocionantes como llegar a la cima.
Además del arte y la música, en Aspen abunda el bienestar. Y no sólo me refiero a los espectaculares spas de sus hoteles, como el Remède y el Auberge, sino a las bondades naturales de la región, como las aguas termales de Penny y la cercana piscina mineral de Glenwood Springs.
Element 47
Y, por supuesto, no podemos olvidar otro de sus grandes placeres: su excelente gastronomía. Cocina americana en Aspen Kitchen, fusión peruana-japonesa en Matsuhisa, platillos de temporada en Element 47, jugosos cortes en Little Mammoth, cerveza artesanal en Aspen Brewing Company… incluso pizzas infantiles personalizadas en Brunelleschi’s.
Así como este restaurante, Aspen tiene mucho para los más pequeños. El Centro de Recreación (ARC) tiene actividades que van de patinaje en hielo para madres e hijos hasta natación; el Campamento de Aventuras Ajax ofrece desde arquería hasta manualidades; el Centro de Estudios Ambientales organiza caminatas sobre la nieve y tours ecológicos… bueno, pueden estar seguros de que nunca falta algo qué hacer.
Descubrir la historia de Aspen es otra fascinante alternativa, pues lejos de pasar largas horas en un museo, se puede entrar a la famosa Mina Smuggler, visitar el pueblo fantasma de Ashcroft y hasta descubrir el lado desconocido de la ciudad en un tour de la Sociedad histórica.
Aunque usted no lo crea, incluso ir de compras es un modo de explorar el pasado de la ciudad. Visitar tiendas como The Autograph Source, que se especializa en piezas únicas de colección, o Kemo Sabe, dedicada a la estética del Medio Oeste, es acercarse a las raíces de Aspen.
En ocasiones, un buen viaje se puede transformar en un gran viaje, por algo tan simple como una buena noche de descanso. Y para ello, Aspen tiene abundancia de resorts de ensueño, como son el histórico Hotel Jerome, el moderno Limelight, el lujoso The Little Nell o el ya afamado St. Regis, ideal para conocedores.
Tal como dijimos al principio, Aspen es una maravilla en cualquier momento del año, con infinidad de actividades para toda la familia, una espectacular naturaleza y todo tipo de placeres, así que no dejen de visitarlo.
¡Hasta la próxima y viajando que es gerundio!
