Travel Report » Entradas » Manos Mágicas: artesanías y juguetes mexicanos
Ene 12, 2015 Jesús Alonso MÉXICO 0
Medir nuestra fuerza, poner a prueba nuestras habilidades y desarrollar técnicas propias son algunas de las actividades que realizamos cuando jugamos. A todos nos gusta jugar, de una u otra forma y, a cualquier edad, la idea de convivir con otros, mostrarles nuestras capacidades e incluso, crear nuevos juegos es algo que nos acompaña durante toda la vida. El juguete es muy apreciado en todos los aspectos de nuestra vida y más si se trata de uno artesanal, por ello este post va dedicado a las Manos Mágicas: la fascinante creación de los juguetes mexicanos.
Colorido, asombroso y divertido, el maravilloso trabajo artístico de los artesanos se refleja con toda creatividad y magia en una de las tradiciones más cautivantes de nuestro país: los juguetes mexicanos. Llenos de ingenio y humor, los juguetes originarios de México forman parte del entretenimiento de chicos y grandes.
Su elaboración, con distintos materiales y formas, provoca suspiros, recuerdos nostálgicos y admiración, pues forman parte de nuestras costumbres y creencias.
Con una fusión entre lo indígena y lo español, los juguetes mexicanos tienen su origen en las manos de los artesanos mestizos de nuestro país, quienes con gran destreza aprenden de sus antepasados las técnicas para dar vida a estas increíbles figuras.
La historia del juguete mexicano es también la historia de cientos de generaciones. El juguete más antiguo conocido en nuestro país es la pelota, como lo revelan los descubrimientos arqueológicos de figuras de barro con una pelota en la mano. Estas piezas datan del llamado preclásico medio (1300-800 a. C.).
En la Nueva España existió una amplia difusión y fabricación de juguetes mexicanos, ya que durante el periodo del virreinato, las fiestas religiosas o civiles sirvieron de pretexto a los artesanos para imaginar o adaptar nuevos juguetes. En muchas pinturas de la época se pueden ver niñas con muñecas de porcelana o trapo, y niños con trompos, así como cazos y espadas de cartón, máscaras, sonajas, figuras de tule, trompos, pirinolas, tarascas, piñatas, matracas y soldados de plomo.
Combinando imaginación y sensibilidad, sus manos son el instrumento para hacer de la madera, papel, plástico, metal, barro y palmas, verdaderas joyas del patrimonio cultural.
La naturaleza es una gran aliada de los artesanos, ya que les obsequia una gran diversidad de materiales, entre los que destacan las fibras vegetales. Tule, palma, chuspata, ixtle y carrizo se entrelazan en los dedos y con una destreza sorprendente, forman tejidos planos o voluminosos que al ser teñidos con anilinas y colorantes, crean bellas muñecas, canastas, animales y casitas.
Uno de los materiales más apreciados y suavemente moldeados por las manos de los artesanos es el barro, el cual después de dar forma a una sorprendente figura, recibe con pinceladas divertidas, los esmaltes que han de rodearlo de una magia espectacular. Figuras humanas, zoomorfas, silbatos y trastecitos en miniatura son algunas de las piezas más hermosas creadas con el ocre claro, el barro negro y el tradicional barro natural.
Dando origen a cientos de juguetes, la madera es el material predilecto de las manos artesanales. Tallando en raíces, cortezas, troncos y ramas; las navajas, machetes y gubias inician un proceso fantástico que verá sus frutos en juguetes tan apreciados en México como baleros, yo-yos, resorteras, matracas, marionetas, trompos, perinolas, caballitos, gallitos, sonajas y trenes. Manos y madera conviven en armonía, logrando cortes precisos y formas perfectas que darán momentos de intensa felicidad a quien las tenga en sus manos. Inspiradas en el ambiente natural que los rodea, las manos mexicanas llenan de color a los juguetes de madera, imprimiéndoles la alegría de las flores, de los campos, del cielo y de los bellos paisajes que los acompañan durante el proceso de elaboración.
Cobre, plomo y hojalata, también reflejan un fascinante universo que el artesano explora y confecciona en finos y resplandecientes juguetes, como soldaditos, aviones, automóviles, espirales, rehiletes, barquitos que se impulsan con el calor de una vela y las resplandecientes mariposas sobre ruedas que suavemente mueven sus alas.
Un elemento indiscutible de los juguetes mexicanos es el papel. Con diversos colores, tamaños y texturas, las manos mexicanas crean formas estupendas, desde muñecas de cartón hasta los juegos de mesa más divertidos, como la lotería. No olvidemos al vidrio, que con su singular belleza envuelve una explosión de tonalidades que se dan cita al interior de las canicas, un juguete tradicional que ha fascinado a generaciones enteras. Negras, transparentes, rojas, verdes y todas las combinaciones imaginables, las canicas se crean al igual que todos los juguetes mexicanos gracias a la fuerza creativa y habilidad de las manos artesanales de nuestro país y son, las mismas manos, quienes se deleitan con todas estas impresionantes formas que han conquistado el corazón de millones de personas.
Los juguetes son nuestro legado de tradición y de costumbres. En ellos se expresa la manera de ver la vida de las personas que los hacen. En México la variedad de formas, materiales y colores se ha plasmado en las creaciones de miles de artesanos, que recrean sus inquietudes en infinidad de juguetes. Lo más importante del juego son la fantasía y la imaginación que, de un modo libre y creativo, hacen de nuestros juguetes tradicionales, promotores de nuestras tradiciones.
La alegría de los juguetes mexicanos en los estados (MAPA)• AGUASCALIENTES: Gallitos de madera, trompos, baleros, yo-yos, carritos de madera.
• CAMPECHE: Aviones, coches y animales hechos en jipi-japa, una fibra natural que se produce en la zona de Bekal.
• COLIMA: Trompos y baleros de madera, juguetes de plomo en molde, matracas, muñecos de barro.
• CHIAPAS: Muñecas de trapo tzotziles y tzetzales, maromeros de madera llamados ‘chintetes’, juguetes de barro, figurillas humanas y zoomorfas.
• CHIHUAHUA: Tejidos tarahumaras, muñecas de trapo y madera de pino, cerámica rarámuri: “tesgüineras” y vasijas, “parihuelas” (aros), pelotas de madera y tambores.
• DISTRITO FEDERAL: Títeres de barro, marionetas de madera, soldaditos de plomo, rehiletes de papel, aviones de cartoncillo, juegos de mesa como “la lotería” y “el coyote”.
• ESTADO DE MÉXICO: Matracas, sillas de tejamanil, pajaritos con péndulo de barro “alfeñiques” o figuras de pasta de azúcar, perinolas, baleros y trompos torneados en madera. “Carranclanes” de tule (soldados revolucionarios), “Adelitas” y jinetes de tule.
• GUANAJUATO: Sonajas, caballos y serpientes de madera, canicas de barro, títeres de barro y tela, muñecos de cera.
• GUERRERO: Figuras de animales, coches y aviones en guaje, bule y calabazo, máscaras, sonajas, juguetes de barro con algodón, animales labrados en corazón de saúco, jinetes y barcos de cáscara de coco.
•
HIDALGO: Figuras zoomorfas de ixtle o lechuguilla trenzada, flautas de carrizo, pajaritos de palma utilizados como sonaja.
• JALISCO: Cirqueros y equilibristas de barro, figuras zoomorfas de molde con silbato, autobuses, camiones, trenes, barquitos y danzantes tastoanes de barro, máscaras, figuras populares de barro natural y policromado, mulitas de palma o tule.
• MICHOACÁN: Muñecas de trapo y de hojas de maíz, guitarras y sonajas de tejamanil, baleros, perinolas, trompos de madera policromada, ferrocarriles y aviones de paja de trigo o panigua, juguetes de cobre.
• MORELOS: Figuras humanas y animales de pochote, chinelos de papel, alambre y plumas, teponaztles o tambores prehispánicos, perinolas y sonajas.
• OAXACA: Muñecas de barro, “Tanguyús” (muñecas) de barro, animales de tzompantle, copalillo y cedro, alebrijes.
• PUEBLA: Papalotes, figuras en nueces, juguetes de acero, sonajas de ‘gallito’, miniaturas en palma, gallinitas de vidrio prensado.
• QUERÉTARO: Sillas de montar, miniaturas de cuero, animales de varas de sauce, muñecas de trapo, figuras de barro.
• SAN LUIS POTOSÍ: Mulitas de hojas de maíz, changos de piel de conejo, figuras humanas de totomoxtle.
• TLAXCALA: Tambores, culebras de madera, muñecos de hoja de totomochtli, canica, rehiletes.
• VERACRUZ: Muñecas, toros, caballos y cencerros de barro, juguetes de cuero, juguetes de cuerno, concha y carey, “carracas” (que imitan el sonido de las ranas) de cartón.
• YUCATÁN: Trompos chilladores o “churumbelas”, muñecos de cedro rojo, carritos y muñecos de madera, matatenas, caballitos de madera.
Es sorprendente la magia que realizan los artesanos de México, estos juguetes deberían ser más apreciados por el público, ya que cada uno tiene características especiales por ser hechos a mano, así que espero les haya gustado este artículo dedicado a las Manos Mágicas: la fascinante creación de los juguetes mexicanos, para que aprecien el arte y ya no regateen tanto al momento de comprarlos. Si te gustaría volver a ser niño te recomiendo que leas Las mejores jugueterías del mundo.
Sep 07, 2017 0
Dic 04, 2016 0
Oct 17, 2016 0
Sep 05, 2016 0
Ago 31, 2017 0
Ago 24, 2017 0
Ago 02, 2017 0
Jul 31, 2017 0