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3# Dragones de Liubliana

Cuenta la leyenda que la capital eslovena era atemorizada por un dragón y su población vivía entre el miedo de salir de sus muros y el aún mayor temor de no saber hacia dónde escapar. Sin embargo, un buen día apareció el que es uno de los personajes más conocidos de la mitología griega; Jason y los argonautas, los cuales tras un complejo desembarco en la ciudad, se enfrentaron al monstruo logrando doblegarlo. Y así es como se supone que el mito cuenta la fundación de la Liubliana actual.

Precisamente por la importancia que tuvo para la mitología de la ciudad la figura del dragón, vemos la estatua de éste en una de sus plazas centrales, así como cuatro dragones más que forman parte de uno de los puentes que cruza el río que recorre Liubliana; el Ljubljanica.

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2# El edificio vestido

Aunque para algunos no es tan claro como al arquitecto encargado del proyecto le pareció cuando llevo a cabo su obra, lo cierto es que la Biblioteca Nacional de Eslovenia, situada precisamente en el centro de Lubliana es un edificio muy particular. De hecho, aunque su construcción es bastante poco original, los apliques que se han colocado por encima son los que hacen que sea uno de losmonumentos más visitados de Liubliana.

Si te fijas bien, verás que las piedras y ladrillos que conforman la fachada intentan asemejarse a un tejido textil. Las ventanas, se convierten en los pliegues habituales del tejido, y la entrada es la corbata. ¿No acabas de verlo en la foto? Puede que en la realidad la teoría de Bekleidung en la que su autor Jože Plenik se basó te quede más clara.

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1# Zapatos colgados de los cables de la luz

Si paseando por Liubliana ves zapatos colgados de las farolas o de los cables de luz no te asustes. Sus habitantes no están locos, sino que han literalmente imitado una costumbre americana. De hecho, se cree que no se trata de una tradición propiamente eslovena, sino que se ha copiado de los EE.UU y además resulta ser una señal entre bandas urbanas enfrentadas que indica que han logrado deshacerse o tocar a uno de los miembros de sus rivales.

Pero tranquilo, que en la capital eslovena no hay nada que temer, ya que es una de las más tranquilas de toda Europa. Estos zapatos son más bien una tradición que se copió como una moda y que ahora se mantiene con cierta gracia para asombro de los turistas e incluso de algún esloveno de fuera de la capital.

vía: http://nuestrorumbo.imujer.com/5798/3-cosas-que-te-enamoraran-de-liubliana