Travel Report » Entradas » Costa Rica: el mejor destino para viajar con niños (y para ti)
Jul 05, 2016 Jesús Alonso ¿A DÓNDE VAS?, INTERNACIONAL 0
Viajar con niños siempre es complicado, sin importar lo tranquilos o “energéticos” que sean. Y es que desde escoger el destino y el hotel, hasta las actividades y la comida, todo el proceso puede ser un dolor de cabeza.
¡Pero no te preocupes más! Es momento de parar de sufrir (al menos hasta tus próximas vacaciones), pues te traemos el destino ideal para viajar con pequeños: el bellísimo Costa Rica.
Seguro, con muchos atractivos y accesible, Costa Rica es perfecto para un viaje familiar. Es uno de los países más diversos y felices del mundo, con infinidad de que cosas que hacer y que ver, que encantan a chicos y grandes. Y, todavía mejor, encontrarás arroz, frijoles y fruta en cualquier lugar, suficiente para que tus hijos sobrevivan sin quejarse un par de días.
Vamos a conocer las 10 experiencias más divertidas para niños y padres en Costa Rica.
El país de la pura vida es conocido en todo el mundo por la extraordinaria magnificencia de su naturaleza. Y para disfrutarla de un modo distinto al habitual, no hay nada como recorrerla desde las alturas en una tirolesa. Aunque no todas son adecuadas para chiquitos, muchas empresas tienen equipo especial, como Monteverde y Selvatura. Los niños, está claro, hacen la actividad en compañía de un guía experto.
Una alternativa menos intensa pero igual de entretenida, es cruzar alguno de los espectaculares puentes colgantes, una experiencia con el balance ideal entre aventura y tranquilidad, en el que tus niños podrán sentirse como auténticos Indiana Jones (o lo que sea que pase en la tele hoy en día). Posiblemente los más famosos de Costa Rica son los de Monteverde (se recomienda para niños arriba de seis años)
Si las alturas no son lo tuyo, en la tercera posición de nuestra lista, tenemos tomar un safari acuático, un divertido modo para descubrir la naturaleza de Costa Rica. Son especialmente recomendables en la Reserva Caño Negro y el Parque Nacional Tortuguero, por su gran cantidad de vida salvaje y sus actividades ecoturísticas.
Hacia el este del país, la región de Arenal ofrece muchísimo que hacer tanto en tierra como en agua. La experiencia obligada al viajar con niños es definitivamente visitar el volcán del mismo nombre, con gran cantidad de actividades de aventura como caminatas en la selva, rutas de puentes colgantes y claro, la posibilidad de tomar fotos para presumirle a tus amigos.
Otra de las experiencias más populares al viajar con niños, en el quinto lugar del conteo, es hacer rafting por el río, que contrario a lo que se cree, es bastante seguro aunque no aburrido, pues se realiza en zonas con corrientes muy pacíficas.
Actualmente, otra opción que está muy de moda, es hacer una actividad llamada tubing, que consiste básicamente en deslizarse por el río a bordo de una llanta inflable, una vivencia muy disfrutable por chicos y grandes. Encontrarás varias opciones en la zona de Arenal.
Y ya que estamos hablando de agua, una visita a Costa Rica estaría incompleta sin visitar una de sus decenas de primorosas cascadas. Hay, por supuesto, algunas mucho más seguras que otras para nadar. Entre las mejores están las de Llanos de Cortés, Montezuma o Río Fortuna.
Si eres de los que prefieres mar que río, las playas de Costa Rica no se quedan atrás en diversión. Y por eso, nuestra octava experiencia es tomar una clase de surf. Además de surcar a las olas y pasar un rato inolvidable, los pequeños podrán aprender una habilidad que les durará toda la vida. Las playas más populares para esta actividad son Nosara, Montezuma, Tamarindo y Talamanca.
Y, como en el mar la vida es más sabrosa, nuestro número nueve es justamente, tomar una clase de cocina. Además de preparar, y por supuesto probar, platillos de la suculenta gastronomía costarricense, es una actividad ideal para reforzar lazos, y en una de esas, inspirar al próximo Masterchef Junior. Muchos hoteles las tienen disponibles por un costo extra.
Como en este precioso país la diversión nunca para, en nuestra décima y última posición está pasar una noche en una casa del árbol, al estilo de la familia Robinson. Las hay de todo tipo, desde sencillas hasta de gran lujo. Elijas la que elijas, puedes estar seguro de la pasarás como nunca. Eso sí, no dejes de ver el Castillo Mastate, una maravilla arquitectónica en medio de la selva.
Además de las anteriores, otras buenas opciones son recorridos a caballo, talleres de conservación, tours de chocolate y caña de azúcar, y esnórquel. ¿Listo para viajar a Costa Rica con toda la familia y no morir en el intento?
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