El desfile del Sambódromo de Rio de Janeiro
Todo el mundo sabe que la capital mundial del Carnaval está en Rio de Janeiro. Viajar a este destino brasileño en esta época del año es sumergirse en una aventura fascinante de música, color, fiesta y una buena dosis de locura. Y si el carnaval es la religión, el Sambódromo es su templo.
Hay varios recintos de estas características en diferentes puntos del país, pero éste es sin duda el más emblemático: el Sambódromo da Marquês de Sapucaí, diseñado nada menos que por el arquitecto Oscar Niemeyer, uno de los artífices de la ciudad de Brasilia, en el año 1984. Con 550 metros de largo y enormes gradas a ambos lados, este lugar acoge los fantásticos desfiles carnavalescos cariocas.
Las escuelas de samba de la ciudad trabajan y ensayan durante todo el año para tenerlo todo a punto el día que desfilan en el Sambódromo. Algunas de estas escuelas pueden llegar a sacar a la calle a más de 3.000 integrantes vestidos con llamativos e imaginativos disfraces y bailando de forma frenética al ritmo de la llamada samba-enredo. Tal es la cantidad de bailarines que los desfiles, aún cuando solo se acoge un máximo de 6 escuelas por noche, se prolongan durante horas y horas.
Asistir a este indescriptible espectáculo no es fácil: un asiento en la grada del Sambódromo de Rio de Janeiro puede costar más de 150€ y es preciso reservarlo con mucha antelación. Eso sí, el precio vale la pena.
vía: http://www.viajesyturistas.com
