Guía para viajeros que hablan un solo idioma
¿Te vas de viaje y lo único que hablas es el español a medias? Aquí una guia para viajar al extranjero y no quedar enredado con el idioma
Será necesario que además de preparar la maleta y tu camarita, tengas listas y aprendidas las palabras fundamentales que vas a ocupar en la región a donde vayas, lo demás dependerá bastante de tu sentido común.
Si de plano te quedas con cara de what, contacta desde el principio y en tu país, una agencia de viajes que se encargue de los trámites y el relajito del papeleo, además, pueden contactarte con hoteles que hablen tu idioma, y ya entrando en confianza, pídeles que vayan por ti al aereopuerto para ahorrarte mentársela al taxista porque ya te perdió del camino, y si de plano te vas a aventar al taxi, entrégale la dirección anotada con letra legible en un papel.
Averigua desde antes, cuáles son los medios de transporte mas recomendables. Si estas en una ciudad grande, date un paseo por el metro o el tren, acuérdate que los iconitos y señalizaciones son una salvación, lleva contigo tu mapita a todos lados además del número telefónico del hotel. Si tomas taxi averigua los precios habituales para que mínimo si te ven cara de turista, sea la de un turista muy abusado.
A la hora de comer, viene lo bueno. Generalmente los desayunos están incluidos en el paquete del tour. Cuando tengas el menú en tus manos y si no previste desde tu casita cuáles son los platillos típicos y sabores propios de la región a donde vas, averigua de que se trata el menú y que contiene el platillo. Las fotografías son un ganchote para abrir tu antojo y para que le señales al mesero cuál platillo quieres. Si te crees muy bueno para las adivinanzas, pues aviéntate a probar algo nuevo, seleccionando al azar, y esperar la sorpresota que te vas a comer.
Date tiempo para aventarte una buena caminata por los lugares cercanos sin olvidar tu mapita, en donde ya habrás señalado los lugares que te mueres por visitar. Ubica muy bien los sitios importantes que todos conozcan como monumentos, edificios altos o alguna estación de autobús.
Sabemos que desde chiquito te cae gordo, pero ahora aunque no quieras lo vas a necesitar, en efecto, me refiero al tumbaburros, el pequeño diccionario que te sacara de dudas. Apréndete por ejemplo los saludos y despedidas, los agradecimientos, las disculpas para la hora de regarla y apréndete cómo decir: “no soy de aquí”, “soy turista” o por lo menos “mi no entenderr”. Además, no te olvides de checar los precios que se acostumbran y aprende a preguntar ¿cuánto cuesta? Nada más no se te ocurra, poneerte a regatear.
Y a la hora de hacer del uno o del dos, pues por lo menos aprende cómo preguntar ¿dónde está el baño? Y si puedes utilizarlo.
Y para cualquier otra cosita, utiliza el Internet, la mayoría de los hoteles cuentan con el servicio y ahí podrás encontrar la información que requieras sobre el lugar en el que estás y cientos de traductores en línea.
Y un tip muy bueno hablando de Internet, es que desde antes de salir, envíes a tu correo electrónico la información necesaria que pudieras olvidar o perder, como el itinerario, los lugares que quieres conocer, algún plano, la dirección del hotel, los datos de la agencia de viajes.
Vía: terra.es
