1. De pequeño, eras el último en dormirte en las fiestas de pijamas.

2. Y ahora, pasas horas inquietamente despierto luego de que tu pareja se queda dormida al lado.

3. Tienes amigos en otras zona horarias que te hacen compañía cuando todos a tu arededor se duermen rápidamente.

4. Programas emails que se envíen más tarde para que tu jefe* no crea que trabajas a las 4 a.m.

• Y colegas, profesores, amigos y padres.

5. Trabajas todo el día, pero en realidad no terminas nada hasta que no estás solo en plena noche.

6. Si tienes compañeros de cuarto, durante tus horas de trabajo más eficaces te la pasas caminando de puntillas y escribiendo lo más calladamente posible.

7. Conoces todas las tiendas y restaurantes 24 horas de tu barrio.

8. Y los repartidores de comida nocturnos se saben tu nombre.

9. Tus inofensivos mensajes de texto son interpretados como los de un borracho pícaro, por el hecho de que los envías a las 3 a.m.

10. Acostarte más temprano no significa que vas a dormir más. Significa que vas a dar vueltas y vueltas durante horas.

11. La gente siempre te pregunta por qué te levantas tan tarde y no sabes qué decir.

O también: “¿Nunca duermes?”

Y: “Guau, eres realmente un vampiro.”

12. Tus amigos siempre están cansados ​​y listos para irse a casa cuando tu estás empezando a divertirte.

13. Pero si llegan a hacer planes temprano, con toda seguridad eres el último en aparecer.

¿Brunch al mediodía? ¿Qué te parece a las 3 p.m. mejor?

14. En serio. Todo lo que tenga que ver con despertarse por la mañana apesta. A la mierda los despertadores, el amanecer y los pajaritos cantando.

15. La gente se la pasa dándote consejos bienintencionados sobre cómo quedarte dormido más rápido.

Y, por desesperación, lo has probado casi todo.

16. Tus padres siempre han sufrido por tu falta de sueño.

17. Y, con los años, has descubierto la manera de escondérselo.

18. Las mejores ideas se te ocurren de noche.

19. Y te despiertas con un montón de auto-emails y notas apenas comprensibles para acordarte de ellas.

20. Has visto (e Instagrameado) muchos amaneceres.

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21. Despertarte temprano para ir a la escuela/trabajo significa que casi nunca duermes más de 4 horas entre semana.

22. Pero te aseguras de compensarlo durmiendo más de 12 horas el fin de semana.

23. Tus habilidades especiales incluyen: ver montones de programas de TV malísimos…

Comer en silencio en la cama…

Y recorrer mecánicamente Reddit/Tumblr/Twitter durante horas.

24. Por supuesto, eres total y completamente inútil por la mañana y necesitas un galón de café para pasar el día.

25. Pero todo vale la pena por tus horas de paz y callado consuelo en la oscuridad…

26. Escondido del mundo, y de todos sus insoportables habitantes diurnos.