Las calles se cubren de paraguas de colores
Un festival muy colorido, realizado en Portugal. Te comparto este articulo que encontré en la red, sobre el Umbrella Sky Project
Desde que los primeros días cálidos hacen acto de presencia, muchos comienzan a desear que llegue el verano para poder tomar el sol, darse un buen chapuzón en playas o piscinas y disfrutar del calor. Pero, en muchos lugares, durante el verano el sol se convierte también en el peor enemigo, ya que obliga a recluirse en casa durante el día para huir de las altas temperaturas. Ante estas circunstancias, a los habitantes de la ciudad portuguesa de Águeda se les ocurrió una idea de lo más innovadora y, a la vez, artística: un manto de paraguas que cubre el cielo.
Águeda, situada entre las bellas Oporto y Lisboa, es una pequeña ciudad portuguesa de cerca de 50.000 habitantes. Pero, si la visitas en verano, pronto te darás cuenta de que no es un destino como cualquier otro. Desde hace unos años, desde julio hasta septiembre, Águeda se transforma mediante el festival Umbrella Sky Project, un proyecto que convierte algunas de las calles de la ciudad en una marea de paraguas. Si paseas por las callejuelas de la ciudad este verano, la imagen que te espera es la de cientos de paraguas de todos los colores flotando entre los edificios. Los paraguas están abiertos y suspendidos en el aire, de modo que cubren el sol y proyectan grandes sombras redondeadas en aquellos lugares donde se instalan, proporcionando un agradable refugio en los momentos de temperaturas más altas.
Además de ser un refugio contra el sol de verano, Umbrella Sky Project también es un proyecto con ánimo artístico, y no cuesta comprenderlo viendo cómo los paraguas tiñen las calles de alegres colores, creando una imagen única que atrae a miles de turistas de todo el mundo a esta pequeña ciudad portuguesa. Mediante una idea sencilla y de bajo coste, la empresa Sextafeira Produgues, que está especializada en instalaciones urbanas económicas, logra transformar Águeda en un escenario mágico. El día a día queda eclipsado por las tonalidades del arcoíris que cubren las calles, y atrae a peatones y curiosos, que a su vez contribuyen a avivar el comercio. Un empujón para Águeda, ¡y magia para la vista!
Imagen www.casahaus.net
