Las cascadas recién descubiertas de Canadá
Parece que los terrenos inexplorados son cosa de leyenda. Que excepto los inhóspitos paisajes de los polos, o las profundidades de grandes cuevas, no quedan territorios en el planeta aún por explotar. Y de repente un país del G8 da en la campana, y se descubren en sus tierras un conjunto decascadas que jamás habían sido vistas por el ojo humano. O al menos no había quedado constancia de ello.
Esta peculiar noticia nos sitúa en el río Again, en la frontera entre Quebecy Ontario (Canadá). Precisamente allí un intrépido canoísta, Adam Shoalts, se dedicaba a explorar el terreno cuando se vio absorbido por unacaída de agua de unos 12 metros. Solo la primera de otras seis cascadas que encontraría en la zona, y que nunca habían sido registradas. El hallazgo podría representar la mayor cascada encontrada en Canadá en el último siglo.
“Suelo decir que recorrer el río a canoa es la parte fácil, porque has tenido que pasar por una pesadilla para llegar a él“, explica Shoalts, y justifica así el hecho de que estas cascadas no hayan sido descubiertas hasta ahora.
Y es que para alcanzar esta región terrestre, a la que no llegan los aeroplanos, hay que enfrentarse primero al peligroso río Kattawagami, cuya corriente se llevó la vida de un navegante en canoa en 2006. También recorrer a contracorriente un afluente y adentrarse en el tercer humedal más grande del planeta. Solo tras semejante gesta se llega a este paisaje idílico.
Con el apoyo de la Royal Canadian Geographical Society (RCGS), la intención de Shoalts es seguir investigando la zona para poder elaborar mapas concretos de la misma. “Es un reto inmenso tener aún territorio inexplorado a estas alturas”, explica. Un espíritu aventurero, mezclado con fascinación, que le ha llevado hasta aquí.
En la carrera de Shoalts figuraba ya el hallazgo de petroglifos en la Columbia Británica, 40 días catalogando anfibios en el Amazonas o otros tantos esquivando osos polares en otro río inexplorado que en un futuro se espera catalogar. Por tanto, queda claro que es mucho más que un simple aventurero.
Sin embargo, su camino científico allana el terreno a los aventureros del futuro. A los viajeros y viajeras que, gracias a su hallazgo, se acercarán a este rincón desconocido del mundo enfrentándose a los elementos. Su objetivo, tener el placer de conocer de primera mano uno de aquellosrecursos naturales que durante años han esquivado nuestra mirada. Uno de tantos, por mucho que a veces pensamos que no es así.
Vía: The Guardian.
