Los aeropuertos más peligrosos del mundo
De por sí subirse a un avión representa un gran temor para muchas personas, sabemos de algunos accidentes aéreos o de la pérdida de los aeroplanos en medio de la nada, ahora imaginen que el aeropuerto sea un total desastre.
Desde el momento en que el avión comienza a tomar velocidad para su despegue, mucha gente comienza a rezar, otros se hacen los dormidos y no quieren ni asomarse por la ventanilla por cualquier cosa que pueda ocurrir, sin lugar a duda este es el momento de mayor temor a la hora de viajar.
Es por eso que muchos aeropuertos en el mundo se preocupan por que sus pistas estén en perfectas condiciones, aunque algunos, ya sea porque son viejos o mal planeados, resultan ser un dolor de cabeza tanto como para los pasajeros y por supuesto para los pilotos, quienes tienen un gran reto al aterrizar y despegar.
Problemas con la nieve
En el Aeropuerto de Svalbard en Noruega, ni las máquinas más poderosas para sacar la nieve pueden terminar con todo este hielo que pone a prueba a los capitanes del vuelo. De repente surcan los aires, te asomas por la ventanilla y lo único que ves es una espesa capa de nieve, la pista con trabajos se puede localizar.
Sin lugar a dudas aquí las capas de nieve parecen ser lo de menos, y es que el Courchevel International Airport también podría ser conocido como la montaña rusa de la aviación, ya que su pista principal cuenta con algunas subidas y bajadas que hacen que el aterrizaje y despegue sean toda una aventura. Esos franceses sí que gustan de la adrenalina.
¿Poco espacio para el aterrizaje?
¿Van a viajar a Brasil? Por lo que más quieran recuerden no llegar al Aeropuerto de Congonhas, ya que este espacio que fue construido en 1930 y que se encuentra justo en el centro de Sao Paulo, deja un margen de error para los pilotos de casi cero debido al poco espacio para tocar tierra.
Pero esto no solo pasa en Brasil, también el Aeropuerto Juancho E. Yrausquin, que desde el nombrecito parece no ser muy confiable, tiene un grado de peligrosidad muy alto, ya que se encuentra a las orillas de una formación rocosa en las Antillas Holandesas, en donde se tiene poco espacio para despegar y de no hacerlo bien, el agua será su próximo destino.
El Kansai International Airport a simple vista parece ser una gran obra de ingeniería, pero la realidad es que sus apenas 3 millas de pista en medio del mar en la bahía de Osaka representan una descarga muy fuerte de adrenalina para los viajeros, ¿se subían?
Que pongan los semáforos que ahí viene el avión
El Aeropuerto de Gibraltar es uno de los más curiosos y peligrosos que pueden existir. No cuenta con una pista muy pequeña o tiene baches horribles (¿les suena conocido eso?) sino que al momento de llegar a tierra, la coordinación entre el sistema de tránsito de la ciudad y los operarios de pista debe ser perfecta, ya que las naves pasan casualmente sobre las calles.
Ni el sol se puede tomar a gusto
El Princess Juliana Airport tiene una característica que al parecer a muchos les agrada, ya que mientras los turistas toman el sol en la playa de la Bahía de San Martín, los aeroplanos pasan a unos cuantos metros de sus cabezas para lograr un aterrizaje óptimo.
Posibilidades de morir en un avionazo: 1 entre un millón 900 mil, aquí parece que esa cifra cambia, ¿no?
Vía: tn
