Playas sorprendentes a media hora de Barcelona
Barcelona figura entre esas selectas metrópolis del mundo que pueden presumir de tener buenas playas y un largo y animado paseo marítimo cerca del centro urbano. Hasta aquí todo estupendo. Lo que ocurre es que buena parte del año estas playas están saturadas de bañistas, vendedores de productos inverosímiles, masajistas y además, seamos honestos, hay que estar muy pendiente de las posesiones y el agua no es lo que se dice de color turquesa.
Entre los lugares a los que se escapan los locales figuran localidades cercanas de las comarcas del Barcelonès y el Maresme, abundantes en playas con arena de grano medio y grueso que, sin ser resorts tropicales, tienen su encanto. Pero lo mejor de todo es que son fácilmente alcanzables en Cercanías (Rodalies en catalán). De hecho, la configuración de la red ferroviaria, literalmente paralela a la costa, hace que el acceso a las playas sea tan sencillo como salir de la estación de tren y plantar la sombrilla.
Aquí van pues unas cuantas sugerencias para huir del agobio de la capital catalana y sentirse un poco más de vacaciones a menos de 35 minutos de la estación de tren de Sants.
Playa de Ocata
Situada en el municipio de El Masnou, tiene un merecido prestigio. Es una playa enorme y luminosa, de anchura poco habitual en el Maresme, frecuentada por pandillas de jóvenes y familias bien provistas de neveras, sillas, palas y resto de equipamiento veraniego. Tiene áreas deportivas, chiringuitos, un tramo de playa nudista y está bien adaptada para personas con movilidad reducida. Para darse un buen festín, servirá cualquiera de los restaurantes que rodean el cercano puerto deportivo.
Playas del Pla de Montgat, Sant Joan y Les Moreres
Montgat cuenta con dos kilómetros de arena y tres playas, Pla de Montgat, Sant Joan y Les Moreres, divididas por un promontorio rocoso llamado la Caleta de Montgat. En ellas, el mar luce azul intenso en los días soleados. Dispone de un estrechito paseo marítimo que atraviesa zonas ajardinadas, la Torre de Ca n’Alzina (S.XVI) y pintorescos chiringuitos vintage. Frente a la estación de Montgat se ha instalado el flamante complejo Malamar (+34 685 308 670), donde se pueden practicar wakeboard, wakeskate, paddle surf y otros deportes.
Playas de l’Estació, Patins a vela y Pont d’en Butifarreta
Badalona, tercer municipio en población de Cataluña, tiene casi cuatro kilómetros de costa rectilínea, con el trasfondo de las espectaculares chimeneas de la Central Térmica del Besòs, ya en desuso. Justo delante de la estación de tren están las playas de l’Estació y Patins a Vela, donde abundan familias y adolescentes, y un poco más lejos en dirección hacia Montgat, la del Pont d’en Butifarreta. Aquí se encuentra l’Escola del Vent (+34 669 549 019), que alquila kayaks, tablas de surf y ofrece cursos de deportes acuáticos. Las tres playas se extienden paralelas al Paseo Marítimo y en consecuencia están sobradas de terrazas, bares y restaurantes. Además, las animadas calles del bullicioso centro urbano invitan a un paseo, helado en mano.
Playa del Pont de Petroli
Saliendo de la estación de Badalona en dirección hacia Barcelona queda muy cerca la playa del Pont de Petroli. Destaca aquí una enorme estructura alargada, un melancólico pantalán de 250 metros de largo que se adentra en el mar y que antaño servía para descargar el petróleo. Hoy en día se utiliza como lugar de paseo y plataforma científica. Los buceadores disfrutarán con el rico fondo marino ya que el agua acostumbra a ser transparente. Junto al inicio de la pasarela, una escultura de un simio muy humano sujeta una botella con sonrisa condescendiente. ¿Les suena? Sí, claro, es el homenaje de la ciudad a la cercana Fábrica de Anís del Mono.
Playa Port Fòrum
Casi en Barcelona, esta playa y los densos jardines que la rodean contrastan con las vecinas y estridentes chimeneas metálicas de la Incineradora y la Central de Ciclo Combinado del Besòs, como si de la famosa Laguna Azul islandesa se tratase. Está situada junto a la desembocadura del rio homónimo, cuyo cauce ha sido felizmente recuperado y sus aguas tratadas. También queda muy cerca del recinto del Fòrum, a donde se puede acceder por un curioso puente.
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